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2.- Otros fármacos:
- Actúan contra la manifestación de la ansiedad.
- Antiepilépticos.
- Antialérgicos.
- Antivertiginosos.
- Anfetamínicos
- Hormonas tiroideas
- Inhibidores de la prolactina
- Antiparkinsonianos
- Vitamina B1
ACTUAN CONTRA LA MANIFESTACIÓN DE LA ANSIEDAD
Son fármacos que actúan a nivel periférico que se dice. Ello significa que no afectan a la mente. Eliminan temblores, taquicardias, sudoración, sequedad de boca, etc. Ello hace que la persona al observarse se reconozca tranquila, con lo que no se genera ansiedad.
ANTIEPILEPTICOS
Los antiepilépticos tienen las siguientes indicaciones aparte del de controlar la epilepsia:
- Preventivos de la aparición de fases maníacas en el Trastorno Bipolar.
- Potenciadores de los ATD. Pero no tan efectivos como el Lítio.
- Anti-craving en el tratamiento de las toxicomanías. El craving es un anglicismo que define la apetencia por algo.
- Anti-impulsivos, en caso de personas que no tienen tiempo de contar hasta 10 o que tienen la sensación de tener un motor dentro que no les permites estar quitos.
- Anti-bulimia, alguno de ellos la controla bastante bien.
- Tratamiento de las polineuropatias periféricas. Generalmente asociadas al abuso o adicción al alcohol.
- Tratamiento de la ansiedad generalizada.
- Tratamiento del síndrome de las piernas inquietas.
- Tratamiento de efectos indeseables crónicos por el uso de continuado de antipsicóticos.
ANTIALÉRGICOS
Ya lo hemos comentado. Algunos de ellos pertenecen a los sedantes y otros a los anti-histamínicos.
Se usan para el tratamiento de la ansiedad o del insomnio.
ANTIVERTIGINOSOS
La depresión y los trastornos de ansiedad pueden contener en sus manifestaciones sintomáticas los vértigos (sensación que perdemos el equilibrio por rotación), acompañados o no de náuseas y vómitos.
Muy a menudo el síndrome vertiginoso es la expresión de un agotamiento y tensión constantes. Puede manifestarse solo pero generalmente se acompaña de otros síntomas de la esfera de la ansiedad y la depresión.
ANFETAMÍNICOS
Las anfetaminas son estimulantes y muy adictivas pero hay una que aún se usa para el Trastorno por Déficit de Atención y/o Hiperactividad.
También se encuentran indicadas en las Depresiones Resistentes. Yo no lo
suelo dar ya que los efectos indeseables (adelgazamiento, hiper-excitabilidad, insomnio) pueden ser importantes y disponemos de otros fármacos menos tóxicos.
HORMONAS TIROIDEAS
A parte de que tanto el hiper como el hipo tiroidismo pueden conllevar alteraciones conductuales, de ansiedad o afectivos (depresión o manía) que se pueden confundir muy bien con las mismas patologías mentales, cosa que puede conllevar un error de tratamiento, las hormonas tiroideas también se encuentran indicadas en el tratamiento de la depresión resistente. Tampoco las uso por sus posibles efectos indeseables (cuadro de hipertiroidismo) y por la exigencia de analíticas sanguíneas frecuentes.
INHIBIDORES DE LA PROLACTINA
Se había recomendado su uso en la adicción a la cocaína como fármaco agonista en relación al síndrome de abstinencia.
Yo lo he usado alguna vez pero no sé decir aun si es eficaz o no. No lo suelo usar.
ANTIPARKINSONIANOS
Se usa uno de ellos para el tratamiento de los efectos indeseables extrapiramidales de los antipsicóticos y sedantes. Éstos pueden generar fácilmente párkinson farmacológico. El párkinson farmacológico es un efecto indeseable muy incómodo y desagradable para el paciente. Muchos psiquiatras no lo tratan. No es un medicamento inocuo pero hay que valorar la incomodidad que le produce al paciente los temblores, la rigidez y las contracturas musculares.
VITAMINA B1
Se usa en el tratamiento del alcoholismo. El alcohol produce una merma importante del grupo de las vitaminas B. La B1 es importante para evitar la aparición del Delirium Tremens. También es muy importante para evitar un mayor avance en la demencia por alcohol y en el trastorno amnésico persistente inducido por el alcohol. No cura el deterioro existente pero previene que aumente más.
También ayuda en la prevención de la aparición de polineuropatía periférica inducida por el alcohol. Y permite que no avance más. No la cura.
La próxima entrada será la última de los psicofármacos. En ella hablaremos de la importancia de seguir una correcta administración, de consultar ante cualquier síntoma no esperado o efecto indeseable y de cuáles precisan un control hematológico periódico.
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