SALUT MENTAL

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sábado, 28 de julio de 2012

PEDRO y EL LOBO


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Este cuento tan conocido por todo el mundo y que conlleva su moraleja es lo que ha ocurrido en uno de los hogares de convivencia del Projecte Oriol.

Precisamente ha sido Oriol su protagonista.

Pedro y el  lobo narra la historia de un pastorcillo que tiene el encargo del pueblo de cuidar a las ovejas del gran rebaño. El se aburre, como es normal en un adolescente y decide un día gastar una broma al pueblo. Grita “¡Qué viene el lobo!”, el pueblo sale desesperado con palos y cornetas pero el lobo no está. El chico se ríe a carcajadas del pueblo.

Ello pasa varias veces hasta que un día aparece el lobo de verdad. Él lo grita pero el pueblo, decepcionado, pasa de él. Total un montón de ovejas muertas.

Aquí ha pasado un poco al revés.

Oriol es un adulto de 47 años con un CI proporcional a los 6-7 años. Es muy buena persona pero, como a todos nos pasa, tiene sus peculiaridades.

Una de éstas es que tiene una memoria para los nombres de las calles y para la música, brutales.

En su mente existen varios personajes los cuales siempre dialogan con él. No son alucinaciones, son pensamientos intrusivos y una gran imaginación. Los principales personajes son: Lucky Luke, los Dalton, Rafael Nadal, Rafael Casanovas y Oliver Twist. A parte, otras personas que por alguna razón han dejado huellas de memoria en su vida.

Algunas veces estos personajes le hacen malas pasadas y otras veces le hacen reír.

Y él interactúa realmente con ellos. Les habla en voz alta y/o en el  pensamiento.

De hecho, como les ocurre a los niños de 3 a 6 años no se cansa de ver las películas de Lucky Luke una y otra vez. Y siempre habla de sus personajes y lo que ha hecho con ellos o lo que ellos le han hecho.

En el Taller Alba, siempre busca intentar que alguien haga un papel (generalmente de los Dalton) y el quiere jugar con el papel de Lucky Luke. Lo que ocurre es que a los demás no les suele apetecer o aunque quieran jugar o colaborar, no saben lo que han de decir ni hacer ya que el guión se encuentra en su cabeza. Ello acaba conllevando problemas de relación, con lo cual se lo tienen vetado.

Pues bien. Cuando Oriol entró a residir en su domicilio actual, se le trató muy bien (y se le sigue tratando muy bien). Va limpio, aseado, afeitado, con las uñas cortadas (pies y manos), bien y sanamente alimentado (ha perdido unos 10Kg en 5 meses y medio), tiene la analítica perfecta y los dientes muy bien cuidados.

Le compran ropa, calzado. Se lo llevan a todos los sitios. Total que vive muy bien.

Hace un par de meses o un poco más, los soporters me empezaron a comunicar que había algún error de conducta importante.

El error en concreto y que ya ha aparecido en muchas ocasiones tiene que ver con dos conductas que se superponen. La primera, muy típica en los pacientes psiquiátricos con cierto deterioro y en los discapacitados intelectuales es que más que comer, tragan. Ello produce atragantamientos que pueden llegar a producir una pneumonía o un ahogamiento.

Oriol, en el taller, come triturado para evitar dicha situación. Ahora bien, también se atragantan con el agua. Ello ocurre porque más que comer, devoran y se les desacompasa la respiración o se les queda un trozo en la boca y otro unido al primero en la faringe.

Pero Oriol tiene otra característica y es que mientras come puede que rememore o desarrolle alguna fantasía mental o algún recuerdo gracioso. Ello le produce risa. Una risa espástica que tiene dos resultados:
1.- Se atraganta.
2.- Le sale la comida por la boca y va a parar al de enfrente. Al intentar taparse él mismo la boca y seguir riendo y atragantándose, acaba ahogándose más y sacando su comida por la nariz (con mocos incluídos).

Se le reconvino a intentar controlarse y los soporters le amenazaron con sanciones como: comer triturado o comer aparte.

Y aquí empezó el descalabre. Como que no cumplieron con sus amenazas o las levantaron a cambio de promesas, Oriol como cualquier chico de 6-7 años entendió que ello no ocurriría y se estableció una pauta conductual consistente en que si seguía desarrollando dicha conducta en el comedor, recibía un plus de atención muy importante. Y ello solidificó la conducta.

Un día se atragantó de tal manera que el soporter tuvo que aplicarle la maniobra e Heimlich (podéis conocerlo clicando en el siguiente link: http://projecteoriol.blogspot.com.es/2012/03/como-actuar-en-caso-de-atragantamiento.html).

Hace 10 días, cuando los soporters le retiraron el plato de la mesa por su conducta, Oriol dio un paso más. Veamos: lo de retirar el plato, lo de triturar la comida o lo de que comiera a parte, fueron actos que emprendieron los soporters pero la mayoría de las veces se quedó en amenaza o en un intento gráfico de acción que se revertía cuando él aseguraba que no lo haría más. Pero este día, le retiraron el plato de verdad. El se fue a su habitación y allí estalló. Dio un grito brutal. Ello hizo que los soporters acudieran despavoridos por si le había pasado nada. Ahí estaba, sentadito en la cama con cara de mala leche. Les respondió que estaba enfadado porque le habían retirado el plato.

Es decir, la conducta se había complicado con otro nuevo paso para llamar la atención.

En Oriol esto acababa siempre en su casa y con su madre, con la llamada de algún vecino a la policía ya que los gritos podían durar horas.

Ante ello, decidí sancionarlo de manera, si puede decirse ejemplar. No sé si dará resultado pero quizás sí y sobre todo si los soporters saben retomar el hilo aplicando las normas sin compasión.

Y digo sin compasión porqué de no ser así, luego las cosas se complicarían al extremo de haber de sacar al Oriol de dicho hogar.

Una de las amenazas era que se iría a una residencia por una semana. Ello no es bien, bien un castigo. Es un cambio a un lugar más serio, menos personalizado, con más normas y menos atención personalizada.

Y ello es lo que he cumplido después de darle tantas oportunidades como han tenido los soporters de cambiar las normas.

A la acción le he dado carácter de sanción, aunque en el fondo serán unas vacaciones.

Pero dichas vacaciones también irán bien a sus soporters. Creo que entenderán que se encuentran ante un niño de 6-7 años pero que lleva 40 años teniendo esta edad. Luego sabe muy bien su papel. Un niño de 6-7 años ha de saber entender que si incumple las normas, hay una sanción o incomodidad detrás. Y unos padres han de saber que mejor aplicar una sanción suave que, por lástima, tener que aplicar luego sanciones mucho más dolorosas o restrictivas ya que la conducta se ha expandido e instalado.

Decir tengo que los soporters de Oriol merecen todo mi respeto y gratitud ya que son personas muy cuidadosas, respetuosas y sensibles para con los demás. Y es ello lo que les ha perjudicado.

En fín, esperemos que todo vaya bien y que Pedro solo avise al pueblo cuando de verdad viene el Lobo. Dicho de otra manera: más vale prevenir que curar.

lunes, 23 de julio de 2012

LA RUPTURA DE LAS PAREJAS CON HIJOS y BIENES EN COMÚN-5. Procesos complicados. El SAP

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Casos no racionales

Este tipo de separaciones son las que traen de entrada o acaban trayendo graves perjuicios para todos los participantes: pareja, hijos, familiares y amigos.

Estos casos suelen acabar en los juzgados y algunos pueden alargarse por muchos años en el tiempo. Cuestan dinero y salud. Anclan a las personas en el pasado y no les permiten tener una vida plena mirando hacia adelante.
Los casos no racionales van mediados por dos causas: la económica y/o la emocional. Como se deduce, ambas suelen estar interrelacionadas.

1.- Disputas económicas o de bienes materiales: Se trata de un desacuerdo entre ambas partes sobre cómo se “reparte” el botín y las deudas acumuladas a lo largo de la convivencia.

En ello siempre hay un origen de ignorancia o de mala intención.
a)   Se puede salir perjudicado por desconocimiento de uno de las partes. Cuando uno se centra demasiado en lo afectivo de la separación puede firmar o consentir pactos de moral dudosa. Un@ puede no saber que tiene derecho a una compensación por pérdida de poder adquisitivo. Un@ puede creerse que aunque la casa esté a nombre de ambos, al haber pagado el otr@ la hipoteca, le corresponda a este el derecho de propiedad exclusiva y firme una cesión entre partes. U@ puede dejar el coche al otro porque es el que lo usa pero va a su nombre, etc., etc.
b)    Ello también puede ocurrir cuando una de las partes hace un acto de compensación por el daño ocasionado al otr@ al separarse. Ello dignifica a la persona pero puede que a la larga se lamente. Hay que entender que lo afectivo pasa pero el perjuicio económico puede que sea para siempre. Hay que hacer las cosas de manera asesorada y legal. Hay que pensar que la otra persona ello no tiene porque curarle las heridas o compensarle la pérdida afectiva. Imagina que con el afán de compensación moral, firmas que te haces cargo del coste de la hipoteca pero la casa sigue a nombre de los dos; en un momento dado el otr@ puede exigir la venta de la casa y repartir el dinero al 50%. De ejemplos de este tipo hay muchos.
c)   Venganza: no solo como venganza sino como odio, desprecio o cualquier calificativo que implique hacer daño o perjudicar al otr@. Se da el caso de cuentas corrientes conjuntas vaciadas, VISAs con números rojos, multas de tráfico, facturas que se dejan de pagar, desaparición o rotura de objetos considerados de propiedad de un@, pisos destrozados, etc., etc. Por ello es tan importante que la comunicación de la separación vaya precedida por el correcto asesoramiento por parte de un abogado; lo mismo que es de recibo informar al otr@ de que haga lo mismo a no sea que quiera compartir abogado para llegar a un convenio de mutuo acuerdo.


2.- Descrédito social:

A menudo las separaciones afectan a grupos más amplios que el familiar: trabajo, grupo de amigos, familia extensa, vecindario, asociaciones, etc. Es decir aquellos grupos sociales, familiares o culturales con los que ambos mantenían una relación.

Muy a menudo uno de los dos lo abandona o pierde el contacto durante mucho tiempo con el resto de integrantes del grupo.

La reacción psicológica esperable a la noticia de una separación suele ser el desplazamiento del afecto hacia la persona que ha sido “abandonada”. Sobre todo cuando concurren circunstancias como el que se ha ido con otr@. El que está indignad@ con el otr@ suele exagerar sus defectos ante el público y el  que se siente abatido suele mover a la compasión, comprensión y acompañamiento en el duelo.

Ello puede provocar llamadas o mensajes irrespetuosos por parte de algún allegado. Se han dado casos de visitas personales injuriosas, agresiones físicas, exposición al descrédito social (graffitis).

Ello es algo que si no llega a mayores hay que dejar pasar. Pensad que en unos meses todo quedará diluido y los allegados acaban aceptando que la vida es así. Contraponerse a dichas acciones lo único que provoca es que se refuerce el descrédito al dar opción a quien lo practica a sentirse injuriad@ a nivel personal. Va bien aplicar el refrán que dice: “a palabras necias, oídos sordos”.

Pero si el descrédito puede afectar de alguna manera la nueva vida del otr@: publicidad, cartas o mensajes a tu jefe laboral o a tu nueva pareja, denuncias públicas, amenazas continuadas y graves verbales, por escrito u otro medio, agresiones físicas o contra tus bienes, etc. Has de denunciarlo aunque no sepas quien lo ha hecho. No has de entrar en discusión con el injuriante, no has de comunicarte con él/ella; simplemente has de denunciar. Si hay soportes físicos a la injuria como cartas, mensajes, correos electrónicos, entradas en tu facebook, etc. lo has de guardar y presentar como prueba.


3.- El uso de los hijos:

Este sí que es un muy mal tema.

Los hijos suelen usarse como moneda de cambio, como herramienta agresiva hacia el otro o como elemento destructivo de la figura educativa del otro (el conocido SAP, Síndrome de Alienación Parental).

a) Como moneda de cambio: léase “yo tengo a los hij@s, tu si quieres verlo, tal y tal”, “me lo trae con la ropa peor para que yo le compre”, “me dice que si lo quiero tener este fin de semana, lo tengo que ir a buscar a tal sitio y a tal hora” (o a devolver). Hay muchas maneras de obligar al otro a hacer esfuerzos económicos o personales que se salen de lo pactado a cambio de poder ver al hijo. Tanto en la compartida como en la no compartida. Yo recomiendo que las cosas de hablen y no se actúen sin antes haberlas hablado. Hay que pensar que la separación puede ser un dolo importante para una de las partes pero en aquél momento fue la única opción válida para una de ellas y hay que respetarlo, sepa lo mal que sepa. Y también hay que hacerlo respetar. La vida ha de seguir y anclarse en el pasado, pocas veces es una buena opción.

b) Como herramienta agresiva hacia el otr@: ello ocurre cuando te encuentras con que no te permiten la entrada en el cole o no te dan información del hij@, cuando no te enteras de si ha estado enfermo, cuando llamas y no está nunca, cuando te llegan facturas exageradas o no de actos médicos o terapéuticos que tú te has comprometido a pagar y que no se hallan justificados, etc., etc. Es decir cuando cualquier cosa relacionada con tu hij@ se te esconde, se distorsiona o se exagera. Ello va direccionado a hacerte daño a ti. Mi recomendación es que ello suele ocurrir en los primeros meses y que forma parte del duelo pero ha de ser de mayor a menor intensidad y frecuencia con el paso del tiempo. Si se mantiene o se agrava, hay que hablarlo y si no, denunciarlo.

c) Como elemento destructivo de la figura educativa del otro: Este es el caso más grave y triste. Implica un daño formidable a los hijos. Daño que está penalizado por la ley y que puede significar la pérdida temporal o total de la patria potestad de quien lo practica (y a veces de quien lo sufre).Consiste en desacreditar y forzar en las mentes infantiles el descrédito total del otro progenitor.

Se usa la maldad y la manipulación para que los hij@s se posicionen en contra del otro progenitor hasta el punto de difamar (abusos, mal trato físico), negarse a verlo, agredirlo físicamente, etc.

Para el progenitor (o tutor) del menor que es vilipendiado, la vida puede convertirse en un horror. Llegando a poder encontrarse con una orden de alejamiento o en la cárcel.

La manipulación de los menores se produce por inculcación repetida de ideas en la mente del menor (si es pequeño) o en el chantaje y compra de la fidelidad del menor (si ya es pre-adolescente).

Siempre se culpabiliza al otr@ de todo lo que ha ocurrido y ocurre y se adecuan pruebas para que sostengan el “delirio”. Pruebas y argumentos que los menores no son capaces de sesgar y que movidos por el miedo a la propia pérdida del progenitor manipulados o por el no discernimiento acaban con crear en la mente del menor la imagen del mal del otro olvidando cualquier otro buen momento pasado entre ambos y siendo incapaz de racionalizar los argumentos del otro.

Para la existencia de tal manipulación suele usarse una técnica descrita como la del “doble vínculo”. No es que quien lo practique lo haya estudiado, simplemente lo diseña así en su deseo de anular al otr@. El doble vínculo consiste en una afirmación antagónica y un proceso mental que impide a la persona darse cuenta de que ello no puede ser cierto. Pongamos un ejemplo: imaginemos que el progenitor alineante le instruye al menor “a papá/mamá has de decirle toda la verdad, sino no te querré (me pongo triste, no puedo confiar en ti, etc., etc.)” y otro mensaje (seguido o no en el tiempo y contexto) “tu @adre te ha tocado?”; el/la menor puede que responda que no pero el progenitor@ puede que le indique con su lenguaje corporal que le está mintiendo e insista: “ya sabes que  si no dices la verdad, yo lo sabré” y así hasta que el menor capta que si no dice la verdad el progenitor alineante le va a dejar de querer. A partir de ahí el menor dirá lo que sea delante de quien sea para no perder el amor de su @adre. El menor no puede darse cuenta de la falacia lógica entre el que él diga la verdad o diga la verdad que el otr@ quiere oír ya que si no lo hace saldrá perdiendo.

El SAP acarrea problemas muy graves en el desarrollo y maduración personal de los menores afectados ya que para ell@s el doble vínculo actúa siempre y hasta que no lo resuelvan serán esclavos de quien lo lanzó y futuras víctimas de otras personas que lo apliquen para el dominio personal y, a más a más produce personalidades inmaduras o miedosas o raras que de alguna manera ventilarán la energía negativa contenida en el subconsciente por tales actuaciones.

Ello será luego de muy difícil tratamiento ya que quedan encapsuladas y hasta que la persona no las pueda entender, le harán daño y dicho daño puede traducirse en una depresión, en una esquizofrenia o en una psicopatía u otro trastorno de la personalidad.

Ante una amenaza de SAP hay que empezar a acumular pruebas del mismo ya que habrá que hacer una denuncia o aprovechar una denuncia del otr@ para evidenciarlo.

No hay que temer perder al hij@. Hay que actuar para que su futuro sea viable.

sábado, 21 de julio de 2012

LA RUPTURA DE LAS PAREJAS CON HIJOS y BIENES EN COMÚN-4. Los previos a la separación


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Lo más importante en un proceso de separación cuando hay bienes e hijos de por medio es el respeto al otr@.

Cualquier otro sentimiento empeorará, encarecerá y encallará el proceso de separación.

Un proceso de divorcio enturbiado por sentimientos y afectos negativos tiene el peor pronóstico en cuanto a daño personal, anclaje en el pasado, daño económico importante para ambos, daño educativo sobre los hijos y sobre todo el peligro de un SAP (síndrome alienación parental).

El  proceso de divorció tiene dos campos en los que sucede: el individual a nivel psicológico y el práctico a nivel de bienes e hijos.

1.- A nivel psicológico. Ya hemos comentado que hay diferentes reacciones a la demanda de separación por parte de uno o ambos de los miembros de la pareja.

Cualquier anomalía en lo esperable de la racionalidad y respeto mutuo humano, llevará el proceso por mal camino.

Sentirse engañado, querer resarcirse a través de la venganza de un daño sentido, ser codicioso en el resultado económico o de bienes, usar a los hijos como moneda de cambio o de venganza con el otro, los remordimientos de quien toma la decisión o el miedo o las ganas de no tener problemas, nos harán actuar de manera incorrecta.

Hay que recordar que una separación es en principio el fin de la relación con el otro en cuanto a un estado pero ello no significa que los sentimientos que se produzcan hayan de perdurar toda la vida. El mejor resultado es el entendimiento y el respeto a la decisión del otr@.

Cuanta menos contaminación afectiva haya, mayores probabilidades de tener una relación correcta en un futuro próximo. Ello es de vital y universal importancia cuando hay hijos comunes. Y al revés.

Por tanto, hay que tener la mente lo suficientemente clara para apartar sentimientos de cara a poder concretar unos pactos lo más justos y equitativos posibles.

Cuando acuden a mi asesoramiento personas que se encuentran en un proceso de separación que aun no se ha iniciado a nivel verbal, siempre les recomiendo varias cosas, entre ellas:
  • a)   Hay posibilidad de evitarla?
  • b)  Primero de todo, has consultado a un abogad@. Consultar no significa iniciar. Ello es importante para no caer en la venganza o el remordimiento tanto de uno, como del otro.
  • c)   Estás dispuest@ a comunicarlo en un momento de no discusión?
  • d)  A partir de la comunicación eres la persona menos indicada para ayudar al otro ya que le crearás confusión y esperanzas.
  • e)   Tienes una alternativa de vivienda preparada por si es menester apartarse por el bien de ambos?
  • f)    Tienes las cuentas bancarias lo suficientemente claras para poder sobrevivir cuando comuniques la separación?
  • g)  Tienes todas tus necesidades cubiertas caso que tengas que abandonar el hogar deprisa? Transporte, vestir, comer, colegios, extra-escolares, pagos fijos, etc.
  • h)  Y aquellas específicas que el caso por su clínica requiera: posibilidad de mal trato, intervención de la familia extensa, posibles denuncias paralelas, etc.
Si estas preguntas no están resueltas, el proceso se iniciará mal con toda seguridad y se perderá tiempo y energía en reconducirlo.

De hecho estas preguntas planteadas harán que la persona entre en el mundo de lo racional y reubique sus sentimientos en el mundo de lo afectivo y no operante (por muy terrible que sea). Estos se habrán de trabajar pero en su lugar: counselling o coaching, no con un abogado.

2.- A nivel práctico (legal).
Previo a la comunicación ya hemos indicado que una persona tiene que poder responder a las preguntas planteadas en el anterior punto.

Lo más importante es buscar asesoramiento legal en relación a los derechos y deberes que la ley confiere a los participantes de un proceso de divorcio o separación. Las personas a menudo tienen informaciones erróneas o suposiciones no concordantes con el derecho civil.

Por ejemplo:
* Piensan que no tienen derecho a la vivienda común porqué la ha pagado la otra parte estando a nombre de los dos. O al revés: la he pagado yo toda ya que él/ella no trabajaban.
* Piensan que los niños siempre irán con la madre. Ello no es cierto, la ley favorece actualmente la custodia compartida. Hasta el punto que se recomienda que el Juez ante una discordancia de tipo de custodia, se imponga la compartida.
* No caen en que una reacción típica del otro (sea demandante o demandado) pueda ser el vaciar las cuentas corrientes de ambos.
* Piensan que el otr@ les dejará sin posibilidad de vida autónoma por la razón que sea (económica, de vivienda, trabajo, coche) y que ello hará que el juez le dé los hijos al otr@. Ello no es cierto. Los jueces no son tontos por muy caros y con fama que sean los abogados de la parte pudiente.

Por ello es de vital importancia el buscar un consejo o varios previos a una separación. Y otra recomendación, es muy típico que el interesad@ diga: “Ah! Yo tengo un amig@ abogado”. Ello es un error y más si el amigo es común. Si tienes un amig@ abogado pídele la referencia de un tocayo profesional en quien confíe.

Recuerda también que un mediador puede ser muy beneficioso para que el  proceso sea más rápido, ecuánime y menos doloroso.

Recuerda también que hay abogados cuyo interés es más económico que profesional y pueden llevarte a un contencioso que dure más de 3 o 5 años. Un buen abogado hará lo que pueda para evitar el juicio o para evitar que el juicio lleve a más juicios.

Recuerda otra cosa: los abogad@s tienen la costumbre de no explicar aquello que no se les pregunta. Por tanto, lleva bien preparadas todas tus preguntas (las que he comentado en el punto 1 y 2 y aquellas que por la idiosincrasia de vuestro caso se te ocurran).

No seas codicios@, no seas vengativ@ y no seas ingenu@.

La foto que pongo es la de una abogada que merece todos mis respetos en relación a su moral, a su ética, a su dedicación a los casos y a su coste económico.
 
En la próxima entrada hablaré de los casos no racionales, sus consecuencias y su proceso en el tiempo.

viernes, 20 de julio de 2012

LA RUPTURA DE LAS PAREJAS CON HIJOS y BIENES EN COMÚN-3. Comunicarlo y Tipos

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¿Cómo lo comunicamos al otro?

1.- Con un mensaje no verbal. Es decir cuando el que se quiere separar se va físicamente y deja o no un mensaje no verbal (nota, msm, mail, etc. Esta actuación siempre traduce miedo a la reacción del otro. Miedo a una discusión, pelea o violencia; pero también miedo a un drama por parte del otro que nos haga sentirnos culpables o responsables de él o de ella y que nos haga quedar por lástima o responsabilidad. Generalmente ello está abocado al fracaso y a una nueva ruptura.

2.- Usando los medios legales. A veces la persona que se separa hace llegar una nota o documento legal o puede que hasta sea citado por el abogad@ para “comunicarle una cosa de su máximo interés”. Este punto va incluido en el punto no pero lo he querido separar porque indica ya la intervención de terceros. Las causas suelen ser las comentadas en el punto uno pero la reacción que provoca en quien lo recibe implica un desafío de entrada cuya respuesta puede ser: angustia, indiferencia o rabia.

3.- Verbalmente. Ello puede ocurrir de dos maneras diferentes:
        3.1.- provocando una conversación en un momento de no tensión. Ello implica un intento de diálogo constructivo. Creo que para los seres humanos normales en el sentido del respeto al otro, es la mejor manera. Es mejor porque quien habla intentará explicar los motivos por los que ha llegado a esta decisión. Hay quien no sabe explicarlos o no puede o no quiere; ello es un grave error porque la otra persona está en su pleno derecho de saber. No olvides que el desconocimiento provoca desconcierto y ello acarrea reacciones no racionales: ansiedad, rábia…
        3.2.- En medio de una de la múltiples discusiones entre la pareja. Es más impulsivo pero a veces es la única manera de quien lo insta tenga el valor de decirlo. Ya comentamos que ello puede traer diferentes consecuencias derivadas del acaloramiento de la discusión.


Problemas inmediatos en la comunicación:

Aquí diferenciamos entre las separaciones consensuadas y las que no lo son.

1.- En las separaciones consensuadas de verdad, donde ambos miembros comparten que lo mejor para ambos y los hijos es la separación, se entra más fácilmente en los temas materiales y de orden práctico. Si el diálogo existe así como la aceptación de los hechos y el deseo de reiniciar una nueva vida, el mutuo acuerdo es lo mejor.

2.- En las falsamente consensuadas y en las que el otro miembro disiente, la separación se estanca en una etapa emocional. A partir de la comunicación firme e irresoluble, si el otro no está de acuerdo, lo mejor es irse o pedirle al otro que se vaya. Serán momentos y tiempos muy difíciles para ambos y los hijos, ya que si el otr@ reacciona con angustia, la convivencia se volverá un tormento para todos.


¿De qué dependerá la complejidad de una separación o divorcio?

Sea como sea y de la manera que sea, la separación se produce. Un@s pueden convivir hasta que todo esté claro y otr@s habrán optado por marchar o hacer que el otr@ marche.

Hay 4 tipos de participación en el proceso legal y físico de la separación: condescendiente, vengativa, egoísta y racional.

1.- La condescendiente se produce cuando uno de los dos miembros, generalmente el que decide separarse, valora más el hecho de la separación emocional (hacer daño, culpabilidad por la decisión) que no los aspectos prácticos y de los derivados de los derechos de toda persona.  Aquí encontramos las personas que no han buscado asesoramiento legal, que no piensan en el día de mañana y que lo único que quieren es independizarse. Ahí la yerran, ya que la realidad del futuro inmediato les hará ver que no actuaron correctamente para con ell@s. También pasa con el miembro que no acepta la separación, puede, hundido en sus emociones, renunciar a todo lo material y a buena parte de sus derechos. Ello también es un grave error.

2.- Vengativa. Generalmente ocurre con el miembro que no quiere separarse pero también puede ser resultado del despecho o de humillaciones recibidas por quién finalmente decide separarse (infidelidad en general). Si quien  recibe los embates del otro se muestra condescendiente, perderá muchos de sus derechos en la separación en sí.

3.- Egoísta. El egoísmo en las separaciones es parte fundamental, junto con la venganza de la mayoría de los pleitos que en dicho campo civil ocurren. Ello es un craso error, como ya veremos después. Significa que no se es ponderado en las exigencias de los términos del convenio (escrito o no) de separación o divorcio. Uno quiere más de lo que por ley le pertoca. No se pretende una división equilibrada sino partidista de la separación de bienes, derechos y deberes. Las razones son muchas; es típica la de “yo he pagado toda la hipoteca” que se opone a lo que dice la ley sobre división de patrimonios compartidos. Lo mismo puede ocurrir con el coche, el colegio de los niños, etc.

4.- Racional. Es la deseable. La racional no habla de emociones, venganzas o egoísmo, la racional piensa en el futuro de cada uno de los miembros de la familia y sobre todo en los hijos. Ello implica que cuando se llegue al  acuerdo, las vidas de todos seguirán hacia adelante sin quedarse ancladas en el pasado. Evidentemente es la mejor alternativa y la única para que la vida fluya. Todas las demás, tarde o temprano tendrán que abandonarse ya que si no la vida se estanca.

En la próxima entrada hablaremos de recomendable en un proceso de separación o divorcio.